lunes, 4 de junio de 2012

Un poco de orientación vocacional.


Ayer algunos jóvenes presbíteros (jóvenes mormones de 16 a 18 años) se me acercaron para hablar sobre su futuro profesional, fue bonito porque tenían dudas al respecto sobre su orientación vocacional, algunos están apuntando a áreas mas humanas como filosofía y teología, otros a áreas mas concretas como física y matemáticas; por mi parte les asombro cuando les comente que era licenciado en Educación Física, y Teólogo, fue así que me dijeron que porque estudie esas dos carreras tan, a simple vista, inverosímiles. Yo les inculque que las artes, las disciplinas y las ciencias, como tal, no están tan aisladas como pensamos, las áreas están integradas, que el poder de dichas áreas están en función de la razón, del crear y del poder mejorar nuestras vidas, nunca duden en ser felices en lo que hacen, en sus materias, pues en la medida que nosotros ampliamos nuestro saber, sencillamente el universo se expande. Un joven me pregunto ¿pero dudare de la creación, de Dios? Solo le dije: no hay que dudar, Dios es eterno, la formula matemática seria igual a cero, es decir, a un principio intangible, donde todo sumado da un resultado material, pero el cero seria un valor espiritual, que daría valor y totalidad a todo. Después les hable del sacerdocio y como nosotros mantenemos el orden comisco del universo, suena algo poético, pero el poder mismo de la energía y de la materia lo demuestra, pues transmitimos energía y nuestros pensamientos hace que el ambiente se transforma. Quedaron algo contentos, les dije que el fin de todo es comprender en si el valor mismo del creador a todo, pues existe un creador que no tiene un plan en palabras sino en códigos dentro de nuestro mismo universo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario